2 SECRETOS INESPERADOS PARA MEJORAR TU LECTURA Y COMPRENSIÓN

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1. El alimento

2. La condición física


Quizás te preguntes: “¿Y qué tiene que ver mi alimento y mi condición física con la lectura? Leer es leer y no hay nada más que decir.” Es cierto, leer pudiera parecer una actividad estrictamente mental. Sin embargo, leer bien con alta comprensión y a una velocidad excepcional-mente rápida es algo totalmente diferente.

Nuestro cuerpo tiene la capacidad de lograr destrezas impresionantes. De hecho la mayoría de nosotros no hemos llegado a desarrollar por completo todas nuestras habilidades. En muchos casos es cuestión de práctica, pero a veces no estamos permitiendo que nuestro cuerpo funcione a su nivel óptimo.
 

En ocasiones apagamos nuestra mente antes de comenzar



¿Qué desayunaste esta mañana? En muchas culturas es normal el desayunar tocino, harinas, queso, manteca, etc. Y peor aún, muchas personas ni desayunan.

El alimentarse de esta manera impide que el cerebro funcione bien. El cerebro necesita oxígeno, el cual es transportado por la sangre. Cuando consumimos productos altos en grasa saturada (grasa mala) y azúcar, estos impiden que la sangre fluya con normalidad limitando la cantidad de oxígeno y otros nutrientes que recibe nuestro cerebro. Esto crea algo similar a un “corto circuito” en nuestro cerebro. Es por eso que en ocasiones experimentamos falta de concentración, mucho sueño (aunque hayamos dormido bien) y falta de retención aun cuando acabamos de leer o escuchar algo.

Haz un experimento la próxima vez que consumas comida chatarra, por ejemplo: una hamburguesa con doble carne, tocino, papas fritas y un refresco. Después de comer, intenta disfrutar de un capítulo entero de algún libro educativo (especialmente si estas en la escuela y necesites leer para algún examen o algo similar). Después de leer escribe un resumen detallado de lo que acabas de leer. Repite este mismo ejercicio en otra ocasión después de haber consumida una comida saludable, por ejemplo: Un salmón hervido con espárragos, jugo 100% natural sin azúcar y de postre unos arándanos y fresas. Ahora lee un capítulo diferente del mismo libro y después escribe el resumen detallado. Notaras una diferencia en la calidad de lo que escribiste y de la cantidad de información que pudiste recordar.

Los alimentos aquí mencionados únicamente son ejemplos, ya que existe una gran variedad de comida saludable para el cerebro y para tu salud en general. Tus gustos individuales también pueden ser diferentes, pero lo importante es cuidar lo que ingieres para que puedas incrementar tu capacidad mental, concentrarte mejor, y desarrollar la impresionante habilidad de lectura rápida.

¿Tienes que estudiar para un examen? ¿Te asignaron en el trabajo un proyecto que tienes que terminar para esta semana? O quizá simplemente vas a continuar con la siguiente unidad de Súper Lectura. Come saludable y quizá te sorprendas de lo que eres capaz.
 

El ejercicio de tu cuerpo es el ejercicio de tu cerebro.



¿Se te hace difícil crear tiempo para hacer ejercicio? ¿Sabías que el ejercicio no sólo es increíblemente bueno para prevenir enfermedades mortales y lucir bien, pero también puede mejorar tu memoria?

De acuerdo con un estudio realizado por el Departamento de Ciencias en la Universidad de Georgia, Estados Unidos, el ejercicio aunque sea breve, durante 20 minutos, facilita el procesamiento de información y funciones de la memoria. ¿Te imaginas cuanto más productivo podrías ser si regularmente hicieras ejerció? Y no tienes que pasar horas y horas en el gimnasio, solo necesitas pasar unos 20 a 30 minutos diarios haciendo algún tipo de ejercicio.

Como ya se mencionó, el cerebro necesita oxígeno y otros nutrientes que transporta la sangre. Cuando ejercitamos, el corazón se acelera, bombeando más sangre al cerebro que por ende proporciona más del alimento que le encanta a nuestro cerebro, mejorando su rendimiento. A su vez, el cuerpo comienza la producción y liberación de varias hormonas que normalmente no produce en un estado de inactividad. Estas hormonas, aparte de ayudarnos a combatir cosas como la depresión, crean las circunstancias ideales para el crecimiento de las células del cerebro. Esto permite el crecimiento del cerebro en lugares cruciales – la conexión de neuronas. Lo cual en palabra más sencillas significa: recordar más. Y esto es uno de los aspectos que deseamos desarrollar al aprender la lectura veloz. Un consejo adicional en cuanto al ejercicio es que de vez en cuando varíes el tipo de ejercicio que realices. Esto le da a tu mente un desafío adicional.

Es cierto que la vida de cada persona es diferente y posiblemente sea más difícil para algunos hacer estos cambios que otros. Pero pequeños cambios en la vida pueden hacer una gran diferencia. Como dijo Miguel Ángel: “pequeñas cosas hacen la perfección, pero la perfección no es cosa pequeña.”

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